Capítulo 29
Capítulo 29
Miguel le preguntó a Nerea, en medio de un calor sofocante, -Oye, ¿por qué tan abrigada y con bufanda y todo?
Nerea, bombardeada por las preguntas, simplemente balbuceó, -Eh… ¿Puedo subir un momento a dejar unas cosas?
Sin esperar respuesta, subió corriendo, se quitó la bufanda y miró con desespero las marcas de besos que Román le había dejado en el cuello. -¿Qué, Roman es un perro o qué? ¿Cómo me dejó estas marcas? ¿Qué dirán mis papás? Copyright Nôv/el/Dra/ma.Org.
Se maquilló por un buen rato hasta que logró cubrirlas y se puso un suéter de cuello alto. Segura de que nadie notaria nada, abrió la puerta y casi se choca con Samson, que estaba justo ahi.
-¿Sam?
-Lo siento, Nerea, iba a tocar la puerta. ¿A dónde fuiste esta noche? ¡Estaba tan preocupado!
-Esta noche… Nerea lo miró con un destello de tristeza en los ojos. -Después de ganar, quería contártelo primero a ti, pero te vi irte con mi hermana, Intenté alcanzarte, pero unos fans me rodearon, y casi me rompen el vestido. Al final, mi tío tuvo que venir a rescatarme.
Samson se apresuró a explicarle, -No, no te confundas, no me fui con Amapola. Estaba de mal humor. y no queria ella que te afectara, asi que le pedi al chofer que la llevara a casa primero.
Asi que por eso no los encontró en la habitación…
-No pasa nada, solo lamento no haber podido celebrar contigo,- le dijo Nerea, haciendo que Samson se sintiera aún más culpable por haber estado en situaciones ambiguas con Amapola.
-Lo siento, Nerea. De verdad quería celebrarlo contigo. Hasta compré flores y todo… y tu presentación fue impresionante, diferente a cómo eres normalmente.
El brillo de admiración y afecto en los ojos de Samson era evidente. Nerea lo notó y pensó que realmente tenía talento para actuar.
-¿Ah, si? Entonces, cantaré más seguido para ti.
-¡Me encantaría!
Justo cuando Samson iba a tomar su mano, Nerea saltó hacia abajo diciéndole, -Mamá, ¿hiciste todo esto para celebrar mi triunfo?
Viendo a Nerea alejarse, Samson se detuvo, pensando que pronto estarían comprometidos y ella sería suya por completo.
Camelia regañó a Nerea por el ruido, -Baja la voz, no despiertes a tu hermana.
Nerea hizo una mueca, exactamente lo que quería provocar.
Eres una traviesa, ni siquiera nos dijiste nada. En especial tu hermana, que ha perseverado desde el primer episodio, estaba segura de que iba a ganar el concurso. Aquí en frente de nosotros, había prometido solemnemente que iba a traer el premio a casa. Pero tú, le quitaste el lugar. ¿Dónde se queda entonces su honor? Desde que volvió a casa, se escondió en su cuarto llorando y todavía no ha salido.
-Pero mamá, eso no fue quitarle el lugar a nadie. ¡Nere ganó por su talento!- Miguel le defendió a Nerea, mientras Amancio agregaba, -Nere, te vi en la final, fuiste la estrella de la noche.
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-¡Gracias, chicos!- Nerea no podía ocultar su alegría
-Ay, demasiado consentimiento, Pablo intervino, El error fue no avisamos antes, especialmente a Amapola. Llegó creyéndose ganadora y terminó llorando en su cuarto. Ve y llámala a cenar.
Justo entonces, la puerta de la habitación de Amapola se abrió. La chica apareció con un pijama ligero, el cabello suelto y los ojos rojos de llorar.
Camelia, al ver la situación, se apresuró a recibirla, Amapola, ¿ya bajaste? Justo a tiempo, la cena está lista, ven a comer algo. Tu hermana acaba de llegar y ya la regañé…
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-No hay problema, hermana, no es tu culpa.