Rómpeme Cúrame y Olvídame

Capítulo 8

¿Este chico lo habrá entrenado Melody? ¿Le habia enseñado a ser tan hipócrita?

Briar se enojó, entró de golpe y al ver a Melody parada en la sala, todas sus emociones se agolparon en su corazón de una vez.

En los ojos de Melody se reflejaba ese miedo y dolor que venían del alma, y eso hizo que Briar apretara los puños sin poder evitarlo.

-Hace tiempo que no nos veíamos.

Fue lo primero que él dijo.

Melody no le respondió. Al ver que no podia detenerlo Eric corrió al lado de su mamá, tomó su mano y le dijo, -No tengas miedo, mami, vamos a dormir-

Los dos se voltearon, estaban dispuestos a ignorar a Briar por completo.

-¡Esperen!

Su voz llena de furia llegó desde atrás, Melody se estremeció, y hasta Eric notó que las manos de su madre temblaban.

Briaf se rio con rabia, -¿No piensas explicarme lo de este niño?-

-¿Explicar qué?-

Melody miró a Briar, con la voz temblorosa, -Si ya pasé cinco años en la cárcel, ¿por qué sigues sin dejarme en paz?-

¡Fueron cinco años en la cárcel! ¡Habían destruido todo el amor y las esperanzas que ella tenía hacia él! Briar entrecerró los ojos, como si no estuviera satisfecho con esa respuesta, -Fuiste a la cárcel porque te lo merecias, ¿así que de qué te quejas?-

Los ojos de Melody se llenaron de lágrimas, se giró y le dijo a Briar,-Ah sí? Entonces, ¿para qué vienes a rogarme ahora? ¿Una mujer con antecedentes como yo todavía merece que la aceptes en tu casa?-

-Claro que no lo mereces.- Briar se acercó y agarró la mano de Eric, -¡Pero él sí!-

Melody se mordía por dentro para no llorar, pero Eric, sorprendentemente tranquilo, miró a Briar y le dijo suavemente, -Señor Briar Yelamos, suéltame, por favor.-

Ese por favor- fue como una aguja clavada en el corazón de Briar.

Él le dijo, -Llámame papá.-

-No tengo papá.—

Eric levantó la cabeza, incluso sonrió, -Solo tengo una mamá que pasó cinco años en la cárcel.-

En ese momento, Briar tuvo que admitir que había sido derrotado por un niño.

Sin que Melody dijera una palabra, con solo una frase de Eric, lo dejó con el corazón atravesado por mil flechas.

¡Solo cinco años en prisión y Melody había matado a su hijo venir con cara de víctima a cuestionarlo?

va su amada, cómo se atrevía ahora a

De repente, recordó lo que Melody le dijo cuando la llevaron presa hace cinco años.

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Si algún día te das cuenta de que lo que has hecho hoy me ha hecho daño…

Briar sintió un apretón en el pecho, miró a Eric instintivamente y de repente le hizo una pregunta muy tonta, -¿Cuándo naciste, niño?-

-¿Aún lo preguntas? Obviamente en la cárcel.-

Melody se rio hasta que las lágrimas salieron, -Solo tenías ojos para Eda, ¿cómo ibas a preocuparte por si estaba embarazada? Claro, tal vez Eric ni siquiera es tu hijo. Para ti, ¿no soy acaso como una cualquiera?-

Briar, furioso, soltó a Eric y agarró el cuello de Melody con fuerza, -¡Cinco años sin verte y sigues siendo tan despreciable!-

Melody intentó empujar a Briar con la mano izquierda y para su sorpresa, tenía callos.

Melody siempre había usado la derecha, ¿por qué…?

Al recordar algo de repente, Briar extendió la mano para agarrar la derecha de Melody. Ella gritó y de pronto se puso muy alterada, -¡Suéltame!-

Eric también se enrojeció de furia, -¡Deja a mi mamá!-

Se levantó la manga y apareció una muñeca tan delgada que parecía que se rompería con solo tocarla. Esas manos habían sido el orgullo de Melody, cuando dibujaba sus diseños, el mundo entero

brillaba Lante sus ojos, pero ahora…

Las cicatrices entrecruzadas en la muñeca se clavaron en los ojos de Briar, que no pudo contener su conmoción, y sus pupilas se contrajeron violentamente.