Chapter 667
Chapter 667
Capítulo667
-¡Distinguidos invitados y amigos, gracias por su valiosa paciencia! ¡Demos la bienvenida a la protagonista de esta noche, la señorita Luz!
Concluida la presentación, estallaron aplausos y halagos en toda la sala.
¡-Luz! ¡Luz! – Clara estaba tan emocionada que llamó el nombre de Luz, y sus manos estaban rojas
de tanto aplaudir.
En ese momento, desde el fondo del escenario, apareció Julio, vestido elegantemente con un traje de etiqueta negra. Tomó la mano de Luz y avanzaron lentamente hacia el escenario.
-¡Mi papá es realmente guapo! – exclamó Víctor, impresionado por la vitalidad de su anciano
padre.
-Está vestido con demasiada pompa. ¡Cualquiera pensaría que se está casando esta noche! –
Javier miró emocionado hacia el escenario.
-Tu papá ya tiene muchas esposas- bromeó Rodrigo mientras jugueteaba bajo la mesa con la Copyright Nôv/el/Dra/ma.Org.
mano de Noa. Luego, bromeó con una sonrisa traviesa.
De repente, dos miradas frías e intensas, se dirigieron hacia él desde la mesa de al lado, Leticia y
María lo miraban fríamente.
Rodrigo se pasó la lengua por los labios y decidió no causar más problemas.
Javier, sintiendo mucha hambre, agarró sigilosamente un pastelillo, se inclinó hacia adelante
cuando nadie estaba mirando y se lo metió todo en la boca.
Sin embargo, justo en ese momento, Celeste, de la mesa vecina, lo atrapó in fraganti.
-Oye, señor Javier de la familia Pérez, ¿por qué estás comiendo a escondidas?
Javier se atragantó, cuando escuchó su voz y comenzó a toser violentamente, con el rostro
enrojecido. Celeste no pudo evitar reír ante su aspecto cómico, jeres realmente un payaso!
-Ella chocó mi coche y casi me ahoga, y Clara la respalda- murmuró Javier, molesto, mientras se
secaba la garganta.
-No sabes que aquí hay personas mayores, ¿no entiendes las normas, que primero comen las
personas mayores?
Celeste inclinó su delicado cuerpo, apoyando su elegante mentón en el respaldo de la silla, riendo
de manera encantadora y traviesa.
Ella se parecía mucho a su hermana menor.
Javier estaba un poco molesto al principio, pero al ver su sonrisa, sus pequeñas preocupaciones
pasaron a segundo plano.
-¡Miren! ¡Miren rápido! ¿No les parece hermoso el vestido de noche negro y rojo que lleva Luz?
-¡Es cierto! La noté desde que apareció, es simplemente impecable, una belleza deslumbrante.
Casi todos los invitados dirigieron sus miradas hacia Luz, se encontraban cautivados suspirando y
admirando, ese hermoso vestido que llevaba puesto.
Alejandro también se vio atraído por Luz y sus pupilas se contrajeron de repente.
El vestido que Luz llevaba era el mismo que Clara había diseñado con sus propias manos en el
taller de Celeste aquel día.
–
-¡No lo puedo creer! – en ese momento, alguien se levantó de su asiento de repente y exclamó: -¿
No es esta la obra de la maestra Sharon?
-¿Realmente es de Sharon?
-¡En mi vida, nunca pensé que vería una creación de la diseñadora Sharon con mis propios ojos!