Capítulo 103
Capítulo 103
Capítulo103
En ese momento, en la oficina del gerente general del Hotel KS, el ambiente era tenso.
Clara estaba parada frente a la ventana, con las manos en la espalda, emanando un poder
inexplicablemente poderoso y dominante.
-¿Quién te autorizó a publicar ese video?
-Usted dijo que quería un video que generara opinión pública…
Aarón se mantenía de pie detrás de ella, con una expresión descontenta.
-Aarón, como mi secretario y alguien que ha crecido conmigo, deberías saber qué es lo que me
molesta más -Clara se volteó lentamente. Estás ayudándome, pero también tienes tus propias
intenciones. Sé lo que estás tratando de hacer, utilizando esto para mejorar mi imagen pública NôvelDrama.Org content rights.
mientras resaltas las acciones fatales de Leona.
A medida que hablaba, la cabeza de Aarón bajaba cada vez más.
Las palabras de señorita le dolían profundamente.
-Pero déjame decirte que no lo necesito.
Los ojos de Clara se volvieron más fríos,-lo que estoy haciendo es apenas un pequeño esfuerzo, lo
mínimo que se espera de alguien con un mínimo de moralidad. Incluso si odio más a Leona, me
niego a suprimirla de esta manera arrogante. Una vez que los actos de bondad se ponen bajo las
cámaras para que las personas los juzguen y critiquen, pierden su verdadera esencia.
-Señorita, lo siento… solo pensaba…
-No importa lo que pensaste.
Clara se volteó sin expresión, tomó su teléfono y dijo: Voy a llamar a mi hermano mayor ahora
mismo y pedirle que te asigne a otro lugar. Tu forma de hacer las cosas no está en sintonía con la
mía.
-¡Señorita, por favor no!
La cara de Aarón se puso pálida y se acercó, agarrando la delicada muñeca de Clara. -Puedes
castigarme de cualquier manera que desee. Haz que limpie los baños del hotel, lave platos en la cocina o incluso quitame el salario. Solo le pido una cosa, no me haga alejarme de usted… Por favor.
Clara frunció ligeramente el ceño mientras él apretaba su muñeca con fuerza, causándole algo de
dolor.
Pero su mirada intensa en ese momento también hizo que su corazón se temblaba.
Aarón provenía de una familia legal prestigiosa. Su padre era un juez de alto rango, su madre una
abogada reconocida, y sus dos hermanos mayores ocupaban puestos importantes en el ámbito
legal. Aunque no se les consideraba una familia de élite, aún eran una familia respetada en
Valencia. Como el más joven de su familia, recibió una educación de alto nivel y fue mimado
durante toda su vida.
Pero por el bien de la Familia Pérez y por ella, este hombre se había vuelto tan humilde. Tenía un
futuro prometedor por delante, pero solo quería sacrificarse para ser su humilde secretario.
Mientras Clara pensaba en esto, no pudo evitar ablandar su corazón un poco y suspirar.–Esta es la
última vez, y tienes que prometerme que no volverá a suceder tal cosa.
-Gracias, gracias, señorita. Nunca más tomaré decisiones por mi cuenta los ojos de Aarón casi se
llenaron de lágrimas de alegría.
-Ey, tus manos… Clara bajó ligeramente los ojos y curvó los labios.
Aarón se dio cuenta de que aún estaba sujetando la muñeca de señorita, su corazón latía
rápidamente, retiró rápidamente la mano y su rostro se puso rojo.
En la palma de su mano, aún podía sentir el aroma de señorita.
-Entonces, señorita, ¿qué pasará con lel asunto de estar en tendencia…?
-Informaré a Sebastián para que se encargue. Ahora acompáñame afuera.
Clara señaló el saco de traje en el perchero con su delicado dedo, Aarón entendió y rápidamente lo
tomó, colocándolo en el cuerpo de ella como un servidor atento.
-Vamos a encontrarnos con Léona.
Leona se enteró de que nuevamente estaba en tendencia y estaba desesperada.
-¡Mamá! ¿Qué hago ahora?!
Leona llamó a Ema y se quejó, fue tan difícil estar en tendencia la última vez para mí y esa puta
sigue obstinada en hacerme quedar mal.