Capítulo 288
Capítulo 288
Le habia advertido una vez, su cuerpo solo podia ser de él.
Le exigia que, como su mujer, no se le permitia tener ninguna relación o contacto con otros hombres.
Pero ella no tomó sus palabras en serio
Asier estaba lleno de furia, ardia como el calor de su cuerpo.
Elia sentia la creciente temperatura de su cuerpo, que la hacia latir más rápido, comenzaba a temer y lo empujaba con fuerza, su cuerpo también comenzaba a luchar NôvelDrama.Org owns all © content.
No, no queria estar con él de esta manera!
Asier sintió su desobediencia, su gran mano agarró su cintura y la arrastró hacia él, aprisionándola con fuerza.
Robándole el aliento
Esa ligera fragancia a magnolia, como veneno, se metia en su nariz, haciéndole hervir la sangre.g2
“No Elia forcejeaba con él, intentando zafarse.
Elia, en los brazos de Asier, se volvia cada vez más inquieta, como un gatito, luchando intensamente
Su deseo se vio interrumpido, de repente olio en ella un aroma que no le pertenecia, era el olor del perfume de un hombre.
Su mirada se oscureció de repente, soltó sus labios y se alejó un paso.
La llevó bajo la ducha para que el agua lavara el olor de su cuerpo.
Dijo de forma fria y dominante Banate! Si vuelvo a sentir olor a otro hombre en tu cuerpo, te haré arrepentirte“.
Dicho esto, Asier abrió la puerta del baño y salió
El sonido del cierre de la puerta, como si golpeara el corazón de Elia, la asusto.
El agua caia sobre su cabeza, empapando su cabello y ropa.
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So vista se volvió borrosa, el agua fluia con mas fuerza, retrocedió rápidamente para evitar el torrente, apartó el cabello mojado detrás de sus orejas.
Tocaba con la mano su corazón que latia rápidamente.
La situación anterior había sido demasiado peligrosa.
Casi había sido poseida por la fuerza por Asier.
Ya se habia duchado en casa, ahora tenía que hacerlo de nuevo.
Asier decia que olia a otro hombre en ella, era porque había llevado el abrigo de Sergio?
¿Como es que ella no lo olía?
¿Como es que Asier tenia un olfato tan agudo como el de un perro?
Elia estaba aun asustada, respiró profundamente varias veces antes de poder calmarse.
Se puso de nuevo bajo la ducha y se baño cuidadosamente, hizo espuma con el gel de ducha y luego se enjuago.
No había ropa en el baño, solo podía ponerse una bata.
La bata era de Asier, grande y larga.
Cuando se la puso, le llegaba hasta los tobillos.
Las mangas tambien eran grandes, como un disfraz de teatro.
Decidió remangarse las mangas
Después de arreglarse, abrió con cuidado la puerta del baño, asomo la cabeza y miró afuera, sin ver a Asier.
Solo entonces se atrevió a salir del baño.
Aunque no era la mansión en la cima de la montaña de la familla Griera, la decoracion y el diseño de las habitaciones eran casi identicos.
Todo estaba decorado en blanco y negro, era lujoso pero discreto.
Esos sofás de cuero, se veía que eran caros
Y la cama de lujo, cubierta con suave piel de zorro.
Un hombre que parecia ser el mayordomo acababa de llamar a Asier “Señor”
Elia supuso que este debía ser el hogar privado de Asier
No tuvo tiempo de preguntarse por qué la había traido aqui
Todo el tiempo pensaba en sus cuatro hijos, ¿cómo estarían ahora, se habriari despertado ya?
Su madre, Rosalinda, había salido a jugar al poquer de nuevo, pensando que Elia estaba en casa cuidando a los niños, así que Rosalinda no volvería a casa temprano